Bisturí ®© La realidad
(Paradójicamente, cualquier
semejanza con la vida real es pura coincidencia)
Franklin E. Alcaraz Del C.[1]
¿Sabe Ud. cuánto exportaba Bolivia el año que
derrocaron a Sánchez de Lozada? Para hablar en números redondos, como mil
millones de dólares. ¿Sabe cuánto exportamos ahora? Once mil quinientos ochenta
y nueve millones de dólares (cifra para el año 2012). Ojo: con la misma
producción (o un poco menos todavía). En otras palabras, el país exporta – en
términos de divisa fuerte- once veces y media más que en la época de Sánchez de
Lozada. No hay nuevos rubros de exportación. Las industrias que fueron creadas
durante el presente régimen, no generan ganancias. Algunas generan pérdidas.
Las minas “nacionalizadas” como Huanuni, disminuyeron su producción, pero
paradójicamente, contabilizan mayores ingresos. Pero además, prácticamente
duplicaron su número de funcionarios.
Las cifras recaudadas por impuestos también
subieron; pero los sectores económicos que no pagaban impuestos, siguen sin
hacerlo (como los cocaleros, por ejemplo). En cambio los aportantes, aportan
más, especialmente aquellos que tienen ingresos superiores al término medio y
el sector privado, que además tiene cada vez más dificultades para
desenvolverse. Tal parece que en el país multipluri, es delito ser empresario
privado. ¿Cuántas empresas privadas quebraron o están en vías de hacerlo? Sería
interesante conocer este dato. Es cierto que hay nuevas empresas (empresitas,
más bien), pero es posible que sean menos que las que se crean. Hay otras que
cambian de dueño, como los medios de comunicación, por ejemplo. Hay cada vez
menos medios privados independientes. Y se quiera o no, hay también autocensura
en los medios privados. ¿Por qué? El lector tiene la palabra.
Ante este panorama, llama la atención que el
gobierno pida más inversiones.
Un rubro que probablemente también creció, es el
del dinero del narcotráfico. Obviamente su participación en el PIB es solo un
poco mayor a como era durante Goni, pero en términos absolutos la generación y
circulante de efectivo, también posiblemente, sea mucho más que antes; solo que
la cantidad, en términos porcentuales, se enmascara porque subió el PIB.
Otro rubro que también creció apreciablemente, es
la deuda. La deuda externa, claro, pero especialmente la deuda interna. El país
debe mucho más que antes. Por otra parte, un acreedor que antes era
insignificante, ahora es muy importante. Me refiero a Venezuela. Hay muchos
sectores populares afines al MAS que creen que el dinero venezolano que llegó
al país, era (es) donación. Pues no. No era ni es donación. Ese dinero hay que
pagarlo. Y lo va a pagar el pueblo. Por otra parte, ¿alguien sabe cómo se
dispuso ese dinero?
Y, finalmente, de acuerdo a “Milenio”, la banca
nacional va camino a la estatización a través de medidas paulatinas que
incrementan la participación del estado.
¿Las autonomías? ¿Cuáles? Posiblemente la
administración del estado es más centralista que nunca.
Mi compadre Choque sonríe cuando habla del
régimen. Dice que cuando les conviene, nada debe politizarse, pero que en los
hechos, todo lo manejan políticamente. Es que “aparentemente”, dice, “todo está
medido”. Y cuando “todo está medido, nada puede fallar”, como el suele repetir,
medio en serio, medio en broma.
¿Por qué el pueblo no se da cuenta? “Se da
cuenta” dice mi compadre, solo que se sienten identificados con Evo, por eso es
que primero se va a presentar como candidato y luego va a ganar también las
próximas elecciones, dice. “Tal vez no con los márgenes que ganó anteriormente,
pero va a ganar… por una serie de razones, entre las cuales hay una que es la
más importante y de la que no se puede hablar”. En fin…